El chip ya se puede comprar, por si alguien le interesa tenerlo en papel en http://www.lulu.com/shop/toni-oliver-servera/el-chip/paperback/product-20118263.html
Espero que les haya gustado
Divagando
sábado, 12 de mayo de 2012
viernes, 11 de mayo de 2012
El chip, capítulo décimo séptimo
El chip
Capítulo
décimo séptimo.
La
coalición, así llamaré a partir de ahora a los que han conseguido
desbancar a las grandes familias y controlan los chips, para evitar
que las empresas que han conseguido en la bolsa se devalúen y
vuelvan los capitales a circular en manos de corruptos, ambiciosos y
sedientos de poder han salido de la bolsa, dejando esta institución
en una mera inutilidad y donde los grandes tiburones que antes
dominaban todo, arruinando desde las empresas hasta países enteros
por el mero placer de la avaricia tengan que buscar otro sistema para
ganarse la vida.
Poco
a poco, los corruptos gobiernos van cayendo uno detrás de otro dando
paso a gobiernos con ideologías más sociales, si bien para ello
tendrán que arreglar las arcas que los corruptos gobiernos han
dejado vacías y a todos endeudados por muchísimos años.
Ahora
se trata de buscar alternativas, pero alternativas más sociales y
con economías sostenibles, el usar y tirar se tiene que acabar y
buscar un sistema económico donde todos puedan vivir y vivir bien,
esto no quiere decir derrochar. Sino el mantener un equilibrio entre
los que tienen mucho y los que no tienen nada, pero también que
todos aporten al sistema, que no haya quien cabalgue sobre los demás.
Este
sistema tiene una gran complicación y se llama “el ser humano”
de por sí ambicioso, pero con ambición desmesurada, con ansia de
poder sobre los demás por el simple placer de creerse más que los
otros y esto ha sido lo que ha llevado al fracaso al comunismo, al
socialismo, al capitalismo, al feudalismo y a cualquier sistema
conocido hasta ahora.
Ahora
se trata de que nazca otro sistema, pero sea cual sea, siempre habrá
un ser humano que querrá estar por encima de los demás, pero
mientras dure la calma se vivirá mucho mejor.
Ya
no se implantan nuevos chips, los han declarados muy perjudiciales
para la salud humana, pero las los que lo llevan todavía no han
encontrado la solución para quitarlos sin peligro para la vida de
los seres humanos, si bien, para que no caiga en malas manos se
mantiene el control sobre los que hay.
….................................................................
En
algún lugar, muy remoto y cercano a la vez algunas mentes ya están
planeando como derribar a los nuevos gobiernos haciéndoles la vida
imposible para que no puedan implantar las medidas sociales
pertinentes para que los ciudadanos puedan vivir una vida tranquila,
próspera y en armonía con todo el resto de la naturaleza...
“No
olviden nunca que los grandes salvadores del mundo sólo quieren
salvar su mundo pero con el trabajo de os demás, no el mundo de los
demás.”
jueves, 10 de mayo de 2012
El chip, capítulo décimo sexto
El chip
Capítulo
décimo sexto.
En
la sala de control de la base militar del Área 51 están reunidos a
puerta cerrada la oficial al mando el el Sr. informático con gafas y
la jefa del departamento, la mujer de unos 51 años y con pelo corto
y oficial al mando del área.
La
oficial le comenta al joven: hemos recibido una oferta de una delas
grandes familias que antes controlaba todo esto muy interesante
económicamente para que localicemos a los nuevos jefes, que seguro
llevan chip y los eliminemos, he revisado su historial y se que no
lo vas a tener muy difícil, lo conseguido a partes iguales si lo
conseguimos.
El
joven informático lo piensa un poco, como si no quisiera aceptar,
pero al final, al cabo de unos minutos, decide aceptar el trato.
Así
me gusta responde la Jefa, de lo que se ha hablado aquí ni una
palabra, solo entre tu y yo, tampoco vamos a comentar nada de nada
hasta que esté todo el trabajo terminado.
De
acuerdo, contesta el joven informático.
El
joven sale del despacho con cara de preocupación, ocupa su puesto y
sigue su rutina diaria, como si nada pasara, pero mientras empieza el
trabajo de investigación para conseguir saber quienes son los
auténticos jefes, cosa nada fácil.
En
las montañas desérticas y rocosas australianas cerca de Simpsons
Gap una señal de alarma suena en uno de los ordenadores, alguien
está rastreando y buscando información sobre el grupo y sus jefes,
enseguida se ponen manos a la obra para localizar al rastreador, cosa
que no tardan mucho tiempo en hacerlo, pues en este caso hay
prioridad absoluta.
Unas
horas después, el joven informático, consciente del peligro que le
reporta el que le hayan descubierto y a sabiendas que puede no
pasarlo muy bien si van a por el, sin pensárselo dos veces, activa
el chip de la jefa y el suyo para ser eliminados, cosa que tarda
apenas unos segundos montándose un gran revuelo dentro de la sala de
control, en principio solo ven al joven que se ha desmayado, pero al
comprobar que no respira ni tiene pulso deciden llamar a seguridad
que no tarda ni un minuto en entrar en la sala, al ir a avisar a la
jefa se dan cuenta de que también está en el mismo estado que el
joven, sin respiración y sin pulso.
El
jefe de seguridad ordena que se lleven los dos cadáveres y que siga
el trabajo normal a los demás operarios.
Una
vez desalojada la sala de los cadáveres, el jefe de seguridad decide
investigar el terminal del joven, que además estaba abierto y con la
pantalla donde registraba los últimos pasos del joven ante el
terminal, pudo comprobar que lo último que hizo fue la la
autoeliminación y la eliminación de la jefa. No pudo comprobar nada
más, pues sus conocimientos informáticos no daban para tanto, pero
con esto decidió que ya tenía bastante para cerrar el caso, cosa
que hizo enseguida.
La
rutina y la normalidad volvieron a la secreta oficina de control y
seguimiento del ciudadano del Área 51 como si nada hubiera pasado.
Las
patrullas de seguridad militar seguían recorriendo toda la desértica
área y vigilando que no pasara nadie en el territorio de la base,
cosa que a veces se encuentran intrusos, gente que piensa que todavía
se guardan los cadáveres de los extraterrestres y sus naves allí en
sus entrañas y otras personas que por el simple placer de intentar
clarificar sucesos extraños, según dicen que por aquella zona han
sucedido. Lo cierto es que la verdad nunca se va a saber y si se sabe
no se va a creer, pues poca gente se cree las informaciones del
Gobierno de turno sobre los temas UFO y temas paranormales o no
identificados.
Una
serpiente se va arrastrando por el desierto en busca de calor y
alimento, se acerca a un matorral que hay cerda de un hermoso cactus,
lugar donde decide que es bueno para bajar un poco la ….
miércoles, 9 de mayo de 2012
El chip, capítulo décimo quinto
El chip
Capítulo
décimo quinto
El
mar está en calma, las azules y transparentes aguas con su ligero
oleaje se van filtrando por la blanca arena dela playa, una hermosa
playa donde las palmeras, cocoteros y otras especies de verde
vegetación intentan llegar hasta las azules y transparentes aguas
marinas, un sol radiante y caluroso refrescado por la ligera brisa
marina que recorre el atolón de Alifu Dahaalu, allá por las Islas
Maldivas. Un verde césped muy bien cuidado, unos jardines tropicales
envidia de cualquier amante de la jardinería, el verde predomina en
medio de esta hermosa isla, hermosa entre las muchas que forman el
gran archipiélago de atolones, todos ellos muy hermosos y
paradisíacos.
En
el hotel Sun Island Resort Spa, justo en su restaurante, La Srª
Australia, el Sr. Francés, El Sr. Ruso y el Sr. Oriental, todos
ellos sentados en una mesa redonda en donde han colocado los mejores
manjares disponibles del momento regados de los mejores vinos debaten
sobre los resultados de sus acciones y sobre la situación actual en
el mundo y el control que han tomado sobre los chips y las fortunas
de las grandes familias.
El
Sr. Oriental toma la palabra: Ya tenemos el control y hemos apartado
a las grandes familias, estás siguen destrozándose ellas mismas,
las unas con las otras. Un yate en la que se habían reunido dos
familias casi al completo sufrió una enorme explosión y se hundió
son dar tiempo a que alguien se salvara, no ha habido supervivientes
y tampoco, por lo profundas que son las aguas en el lugar del
naufragio se va a rescatar el barco para saber las causas. El avión
de otra familia sufrió la pérdida de un ala en pleno vuelo
estrellándose en las montañas suizas. Algunos accidentes de
tráfico un tanto extraños en otros miembros, ya no queda casi nadie
de estas familias, nosotros controlamos todos, o casi, sus bienes.
También ya controlamos los Gobiernos y los chips de los ciudadanos,
al controlar el los bienes de las grandes familias también
controlamos a la banca y a la mayor parte de las grandes empresas,
solo una pequeña parte se nos ha escapado y la han comprado unos
Jeques árabes.
Y
ahora la gran pregunta ¿Qué hacemos con todo este poder? Si lo
entregamos volverán a usarlo de cualquier manera, si nos lo
quedamos, aunque sea con buena fe nos volveremos ambiciosos y
acabaremos entre nosotros. Tampoco podemos quitar los chips porque no
se ha encontrado la forma, todavía, de que no tengan el efecto
secundario de la muerte en unos días. Tampoco la gente se iba a
creer nada de todo lo que ha pasado porque tampoco se han enterado de
nada, somos anónimos y no nos conoce nadie, no saben ni que
existimos.
El
Sr. Francés añade: Tenemos todo el control económico, el control
de casi todo el mundo y coincido con el Sr. Oriental que no podemos
entregarlo sin más ni de cualquier manera, ni a los estados ni a los
ciudadanos, no entendería ni el como nos hemos hecho con el ni
porque se lo devolvemos, por otro lado lo malgastarían, aumentaría
la inflación y la ambición de poder volvería a recaer en unos
pocos llegando al punto anterior a antes de empezar toda esta
aventura.
La
Srª. Australia toma la palabra: no podemos devolver el poder de
control de chips, pues si lo hacemos se harán un mal uso y todo
volverá a estar como antes, por lo menos no podemos devolverlo hasta
que se puedan eliminar sin peligro para la población y de momento no
tenemos esta opción.
El
Sr. Ruso añade, tampoco podemos devolver el control de los satélites
a los estados y menos a los militares, mucha gente es afín todavía
a las grandes familias y los usarían para recuperar el poder de una
forma u otra, solo podemos dejar que sirvan para el uso normal de las
telecomunicaciones, el uso civil, pero el control lo mantenemos
nosotros.
El
Sr. Francés comente: Podemos hacer una coalición y formar una
sociedad entre nosotros y mantener el control hasta que consideremos
que podemos entregarlo. Ventajas, mientras dure la coalición esto va
a funcionar, pero en cuanto a alguien le entre la codicia todos los
demás estamos en peligro y la codicia humana puede atacar a
cualquiera de nosotros, al igual que ha atacado a las grandes
familias y entre ellas se han liquidado. También es cierto que todo
lo que hemos expuesto es real y no podemos dejar que suceda. Y dadas
las posibilidades que barajamos, aun con su riesgo, propongo la
alianza.
Asintieron
todos y así lo acordaron y dejaron los detalles para otro día, el
día era precioso y la isla también, era el momento de terminar de
tomar el café, tomarse un descanso en alguna de las hamacas
colocadas debajo de alguna que otra palmera a cerca del mar y
disfrutar de la maravillosa isla y de los excelentes servicios de que
dispone el Sun Island Resort Spa.
Las
cuestiones técnicas ya las resolverán los especialistas en estas
materias...
martes, 8 de mayo de 2012
El chip, capítulo décimo cuarto
El chip
Capítulo
décimo cuarto.
Un
flamante Ferrari rojo acaba de pasar por el control de un gran
palacio en las afueras de Berlín, día nublado, un jardín
perfectamente cuidado, hasta el más mínimo detalle, el camino hasta
la casa totalmente empedrado, nada de asfalto a la vista, todo el
trayecto rodeado de frondosos árboles que lo reciben como si de un
verde túnel se tratara, imagen preciosa, el contraste del verde con
el rojo en el centro sobre las marrones y brillantes piedras del
camino, al final del trayecto es recibido con la majestuosidad de una
gran palacio de tres plantas y por lo menos 15 ventanas por planta,
enfrente de la entrada una gran placeta adornada con una gran fuente
de cinco piletas en el centro, la caída del agua chocando contra el
agua de la pileta de más abajo le pone música al recibimiento.
El
Ferrari aparca justo delante la entrada donde le espera el mayordomo
vestido de blanco y le acompaña hacia el interior. Una iluminada
entrada con la iluminación de unos grandes ventanales y una gran
escalera de divorciados en el centro (llámese escalera de
divorciados a la escalera que empieza con una sola escalera y luego
se divide en dos). El mayordomo acompaña al viajero a una sala que
tiene justo a la derecha, rodeando y adornando el portal dos grandes
colmillos de elefante, colmillos que llegan hasta la parte superior
de la puerta.
El
mayordomo abre la puerta y una gran librería aparece rodeando todas
las paredes, la estancia es bastante grande y a simple vista miles de
libros en sus baldas se pueden contar. En el centro una mesa de
madera muy bien lacada con incrustaciones de marfil formando lindos
dibujos sobre toda la superficie. Justo detrás una gran silla y al
otro lado dos sillones. El mayordomo le dice al visitante que espere,
sentado si quiera, que en unos minutos vendrá el Sr.
El
visitante se sienta, pero no puede dejar de admirar la enorme
cantidad de libros que en las estanterías se posan por lo que al
poco tiempo de estar sentado no puede resistirse y se levanta para
ver que tipo de libros tiene el Sr. de la casa, puede comprobar que
los libros son bastante antiguos, el primero que coge constata en la
parte inferior la fecha de edición de mil setecientos cuarenta y
ocho, casi se le cae de las manos, pero de emoción. El tener libros
de estos entra las manos no se pude todos los días, si bien no es
por falta de dinero, que de eso tiene, sino por de interés en
general, pero al verlos allí le ha emocionado. Sigue ojeando los
títulos y las fechas y se da cuenta de que la colección en sí es
muy valiosa y que cualquier coleccionista pagaría una gran fortuna
por ella, como la que seguramente pagó su dueño.
Tan
ensimismado con los libros estaba que se sobre saltó cuando escuchó
el ruido de la puerta, un señor muy bien trajeado, con gafas, calvo,
de unos metro ochenta de alto y uso 60 y algo más de edad.
Por
favor, siéntese y hablemos. Voy a ir al grano, usted es forma parte
de los privilegiados que no llevamos chip, también al ser parte de
este grupo sabe que no podemos eliminar a los que no lo llevan
directamente y usted se dedica a este oficio, bastante bien pagado
por cierto. Sabe que últimamente hay grandes desavenencias entre las
familias y que hay que acabar con ello.
En
este sobre hay sus honorarios, la mitad ahora y el resto al finalizar
el servicio, también hay los nombres de quien va a ser su trabajo.
El como es cosa suya, el cuando también, pero cuanto antes mejor.
Por la policía no se preocupe, está completamente controlada, pero
si hay algún accidente tanto mejor, las carreteras, los aviones, los
yates son aparatos muy peligrosos....
Al
cabo de un rato el Ferrari va camino de la puerta de control, pisando
las marrones y brillantes piedras, dejando atrás la maravillosa
fuente de cinco piletas tocando la música al caer de las gotas sobre
el agua, el trino de los pájaros en los verdes frondosos árboles.
La gran puerta metálica se abre sola sin que nadie le haga preguntas
y sale a la calle para seguir su camino hacia alguna parte que solo
el visitante conoce. El rugir del motor se hace sentir al acelerar,
un inconfundible y exclusivo sonido que sólo los Ferraris tienen, es
si sello de identidad, al igual que el “Cavalino rampante” que en
sus morros lleva.
En
pocos segundos alejándose se pierde de vista y el motor se deja de
oír...
lunes, 7 de mayo de 2012
El chip, capítulo décimo tercero
El chip
Capítulo
décimo tercero.
El
avión se esta acercando a la isla, una isla no muy grande, el
aeropuerto se adentra dentro de la ciudad dando la sensación de que
al aterrizar uno va a chocar contra los edificios y salirse por el
otro lado, pero la pericia de los pilotos no lo permiten...
Poco
a poco va descendiendo el avión hacia la pista, en los pasajeros se
nota la tensión, un nudo en el estómago en la mayoría, cuanto más
se acercan a tierra más se dan cuenta de lo pequeño que es la pista
para aterrizar, los edificios la rodean, parece integrarse en la
misma ciudad. Acabamos de aterrizar en el aeropuerto de Owen Roberts
Internacional en la isla Gran Caimán, poco a poco el avión se
acerca a la terminal, un pequeño edificio que más bien parece el de
la torre de control de un aeropuerto privado de avionetas.
Los
viajeros desembarcan y andando se dirigen a la Terminal para pasar el
control de equipajes, cosa rápida, pues no se esmeran mucho en ver
lo que hay dentro, no les interesa, nunca hay problemas.
Dos
hombres vestidos de traje, atuendo discordante entre el resto de
pasajeros , están esperando las maletas, bueno, más bien un par de
bolsas un poco más grande que un simple bolso de mano, cuando llegan
lo recogen y buscan un taxi para que los lleve al Gran Caiman
Marriott Beach Resort, un hotel situado en la misma orilla de la
playa.
El
taxi no tarda no diez minutos en llegar al hotel, pagan al taxista,
cogen las bolsas y se dirigen a la recepción, al entrar justo en el
centro de la puerta de entrada en medio del salón una bella mesa de
hierro forjado como baso y sobre ella un enorme cristal sobre el cual
se encuentra un enorme ramo de flores. Dirigiéndose hacia la barra
de la recepción sobresalen, a la derecha, unos lujosos solas y
butacas colocados alrededor de una bonita mesa de cristal con la base
de hierro labrado, un hermoso centro de porcelana blanca decora la
mesa, la barra de la recepción, toda de madera, se identifican con
sus respectivos pasaportes y les dan la habitación que ya tenían
reservada. Suben con el ascensor hasta el primer piso, buscan la
habitación, abren y se encuentran con una lujosa habitación con dos
camas grandes, con vistas a la hermosa piscina rodeada de palmeras de
toda clase, al fondo el mar azul presidiendo el camino hacia el
infinito horizonte donde el azul del mar se junta con el azul del
cielo, hoy el día claro hace que el calor del sol se note
fuertemente haciendo sudar a la gente por todos los poros y si a esto
le sumamos el exceso de humedad reinante la sensación térmica es
muy superior, por suerte la habitación dispone de aire acondicionado
lo que hace que la estancia sea un poco más relajada que en el
exterior.
Ambos
se quitan el traje que desdice con todo el entorno, aprovechando para
darse una ducha antes de empezar a trabajar y vistiendo algo más
liviano y más apropiado para el fuerte calor que hace en la isla,
pantalón fino y camisa blanca han elegido.
Dentro
de poco va a ser la hora de la cena en el Gran Caimán Marriott Beach
Resort, por lo que aprovechan para bajar al bar a tomar un aperitivo
y luego dirigirse al restaurante para cenar algo.
Una
vez cenados, deciden salir por los bares e la zona y hacer unas
cuantas preguntas sobre oficinas de empresas, cosas que los camareros
no saben contestar, pero que les dicen que en el Anderson Square es
posible que encuentren algo, pues es un edificio de oficinas y si
allí no encuentran algo pueden ir al registro de la Administración
del Gobierno que allí están registradas todas las empresas y tienen
sus direcciones, lo que no sabe e si esta información se la van a
dar.
Al
día siguiente después de desayunar en la terraza de la piscina a
la sombra de las palmeras contemplando el bello amanecer, espectáculo
imperdible por su belleza, el ver aparecer el astro sol de color
naranja como emerge de las profundidades del mar allá en el
horizonte elevándose hacia el azul cielo para luego instalarse en
las alturas caldeando el día, solo enfriado por la termoregulación
marina y las leves brisas que ello forma o por los aires
acondicionados de los edificios.
Salen
los dos en busca de la información que necesitaban para sus jefes,
uno se va al edificio de la Administración del Gobierno y otro a ver
el edificio de oficinas que le comentó el camarero.
Reúnen
la información que les precisaba y deciden mandarla por correo
electrónico, cosa que hacen una vez escrito el informe.
Desde
el continente australiano, que ya estaban siguiéndolos interceptan
el correo y cambian el contenido para mandarlo de nuevo con la misma
dirección de los investigadores.
En
la gran mansión de una de las grandes familias se recibe el correo,
al leerlo el pavor y el enfado se dibujó en la cara de quien lo
leía, no entendía nada, pero se lo esperaba, las empresas fantasma
eran de un par de las grandes familias, por lo que la guerra no
acababa sino que se recrudecía de nuevo, según el informe el que
habían tenido enormes pérdidas era un montaje para hacerles creer
que les estaban atacando. De este modo la cruel batalla entre las
grandes familias en las bolsas cada día era más y más fuerte...
Mientras
en la Isla del Gran Caimán los investigadores se estaban disponiendo
para salir hacia sus destinos de origen, , al salir del hotel, como
aún tenían tiempo, decidieron ir a o comer a un restaurante que
habían visto y que les hizo mucha ilusión, fueron andando hacia él.
Un
camión que iba a bastante velocidad va como descontrolado por la
calle los investigadores lo ven venir, pero no les da tiempo, el
camión se precipita hacia ellos y los aplasta contra el muro de un
edificio, el mismo que les impidió escapar de una muerte segura, el
conductor del camión se ha empotrado la cabeza en la luna del
parabrisas al chocar y el remolque que llevaba ha barrido toda l a
calle arrastrando todo lo que a su alcance ha encontrado, el equipaje
que llevaban consigo y el ordenador portátil ha quedado
completamente destrozado... Al poco tiempo llegan las ambulancias
para recoger a los cadáveres y llevarlos al Chrissie Thomlinson
Memorial Hospital para hacerles la autopsia y saber el porque de....
domingo, 6 de mayo de 2012
El chip, capítulo décimo segundo
El chip
Capítulo
décimo segundo
Desde
algún lugar de las desérticas montañas australianas, donde el el
sol calienta como si fuera a hervir una gran caldera, lejos de
cualquier parte habitada, pero cerca de una de las carreteras que por
ahí pasan, cerca de Simpsons Gap, en un rancho, varias personas
están intentando controlar los ordenadores de la secreta oficina de
control y seguimiento del ciudadano a través de un troyano que han
logrado insertar en los ordenadores por medio de un servidor que
tiene en uno de los satélites y poco a poco ha infectado todos los
ordenadores de la agencia ( secreta oficina de control y seguimiento
del ciudadano). Acaban de insertar un programa que simula a la
perfección el original, pero el control del programa original lo
tienen los de este rancho, control que a veces tienen que hacer uso
para que ciertas personas que han de ser eliminadas lo sean para no
levantar sospechas. Más si cada vez que se da la orden de eliminar a
alguien los “recogedores” de cadáveres se avisan
automáticamente, lo que explica la velocidad con que aparecen en el
lugar. Pero lo que si hacen desde Simpson Gap es filtrar a las
personas que forman parte del equipo liquidador del sistema. En
teoría todo funciona normalmente, las muertes siguen, los
seguimientos también, pero el control total ya no lo tienen las
grandes familias, sino el equipo de la Srª Australia a través de la
brecha en el sistema de comunicaciones que han abierto los rusos, que
por cierto se han hecho con todo el control de los satélites,
incluso de las comunicaciones del al Estación Espacial
Internacional, si bien sólo intervienen en el servidor que allí
está instalado en el cual hay una copia de todo el sistema, copia
que una vez modificada han colocado en servicio para usarla como
pantalla para disimular el control que de dicha base se tiene..
Por
otro lado, en un hotel cerca de la frontera de Italia, una antigua
base militar de la OTAN reconvertida en hotel, cerca de un pequeño
riachuelo, mirando al nordeste se vislumbra unas enormes montañas,
los Alpes, y ya a lo cerca el olor a viñas, verdes viñas de las que
sale un excelente vino y que da nombre a toda la comarca de la
Provence en el parque Nacional de Luberón, justo en la salida de
Apt, en la misma ruta de Viton, Francia, un grupo de científicos de
varias las nacionalidades reunidos allí con la excusa de debatir
sobre las alergias alimentarias y su interacción en el ser humano,
están investigando en secreto como desactivar el sustancia que hace
que al quitar el chip se fallezca en pocos días y encontrar el
antídoto, o por lo menos el camino a seguir para encontrarlo, ya que
allí no disponen de laboratorio....
Algunos
de los participantes han conseguido hacer unas analíticas de los
fallecidos por eliminación del chip y no encuentran, en principio
nada anormal, pero tampoco ha sido fácil, pues los laboratorios y
las analíticas están intervenidas por el sistema, peligrando la
vida de quien haga algo más de lo que se le pide, la información
que trasciende es mínima, con cuenta gotas, pues al poder no le
interesa que se sepa nada del chip, lo único que quieren que sepan
es que es para poder tener derecho sobre los servicios sociales y
Seguridad Social y así eliminar del servicio a los que no tienen
derecho a ello, pocas personas son estas pues para controlar a toda
la población a casi todos se les ha implantado dicho chip....
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